miércoles, 29 de abril de 2009

El amor, la decepción y…








El me vio, el me escuchó

mirar al cielo y decir te quiero

se acercó y me preguntó
y una sonrisa apareció

un silencio me conmovió y
mi corazón se despertó

le miré y me reí
me miró y se echó a reír
tiene unos ojos acaramelados
unos labios abrillantados

pero siempre hay un pero
me decepcionó cuando
una mujer apareció

la cogió, la besó
le miré y me enojé
me miró, se avergonzó
les miré y empecé a correr

alguien me cogió y un beso me dio
sus alas blancas abrió
y conmigo voló

cerré y abrí los ojos
y una lucecita apareció
que desde el cielo me dijo adiós

le seguí y me di cuenta que era Dios



Selena Barea


martes, 31 de marzo de 2009

Antes si

viernes, 20 de marzo de 2009

UNA LIBELULA O UN BORRON DE TINTA

.


una libélula o un borrón de tinta
los cauces empozados, la lluvia
todas las hojas en la boca


zapatos verdes
cuelgan de una fuente muda
huésped del otoño
marzo cultiva otros modos de orfandad


Víktor Gómez

martes, 17 de marzo de 2009

El Arte de la Consagración del Fuego, por Xavier Costa














El tiempo cíclico vertebra la tradición festiva. El tiempo fundamental de las fallas es el tiempo de la representación mítica de la renovación del mundo, que acompaña a la eclosión del ser. El momento de recreación es el de la aparición catártica del fuego en la cremà. En las Fallas existe un año Año Fallero, y un calendario que acuerda el ritmo festivo con las transformaciones estacionales.

































… Las Fallas se originan como una versión peculiar de representación de este sacrificio místico. Mantienen las “viejas piedras” en su representación, tanto en la sociabilidad festiva como en el monumento: el juego, el humor, el comensalismo, el muñeco (ninot), el fuego, etc.., se encuentran hoy en la Fiesta. Además, los actores festivos sostienen aún el sentido purificador del ritual, y lo hacen explícito discursivamente.



… Esta interacción se asienta en el poder de vinculación de la sociabilidad festiva, que congrega a los miembros de una comunidad que cuida la tradición. La efervescencia de la reunión festiva está caracterizada por el juego y sus derivaciones: la poesía y el arte, el humor, la fantasía diurna.

Freud articuló la fantasía o ensoñación diurna con la creación poética y con la imaginación mítica, mostrando que constituyen un sustitutivo de los juegos infantiles y un goce artístico que actúa como placer preliminar que “descarga nuestra alma”. Como en el sueño nocturno, este goce artístico da salida y satisfacción a los deseos reprimidos de un modo deformado y mitigado, elaborados como manifestación artística. Las Fallas constituyen así una fiesta que pone en términos artísticos, poemáticos y fantásticos la antigua conexión mítica ambigua entre la víctima y el dios del viejo sacrificio agrario. La víctima y el dios devienen arte y fuego en la fiesta. En las Fallas arte y fuego se co-pertenecen, y se manifiestan el uno en el otro.
































…La fiesta repite cíclicamente un nuevo “curso civilizador”, haciendo un recorrido de formación que enseña a escapar de la fusión indiferenciada con la naturaleza y de la pretensión de inmortalidad, para volver a aprender el comienzo de la cultura. Tras esos momentos de ausencia e impotencia, de melancolía compartida, que caracterizan a la cremà, la gente baila en circulo alrededor del fuego. De esa danza de noche, entre briznas de fuego y cenizas, vuelve a surgir la Fiesta.

Xavier Costa - Valencia 2005






















evento festivo


Consagración en tiempo de cenizas
nuestro interno pasacalles
en efímeros rituales purifican
de hogueras sin reposo.

Tanta infancia quiero indultar,
salvar del fuego obstinados enseres
que apelmaza la memoria
ahora sátiras,
llamas que reciclan.

Todo monumento arribado
contiene sus risas y llantos
que arde mi figura y se oculta,
cual equinoccio sus días artísticos.



Miguel Iñiguez



domingo, 22 de febrero de 2009

Poema de Laura Lozano, “Difícil de olvidar”

















Por qué no puedo dejar de mirarte
si lo que quiero es olvidarte.

Ya no quiero más sufrimientos,
ya no quiero más miradas

lo único que quiero
es que te vayas de mis palabras.

Mentiras para no recordar que no te puedo olvidar
mentiras para mis amigos para no decir la verdad.

Verdad de
que eres imposible de olvidar.

Pero;
Por qué sigo enamorada de ti

Tal vez seas tú
tal vez sea tu mirada;
Lo que si sé,
es que aquí adentro sigues tú.


Laura Lozano





miércoles, 11 de febrero de 2009

Poema de Jean Peter Rojas: Espero






















Espero
Para Vanessa




Espero que mis oraciones te despierten del polvo

para sobrevivir,

que las calles no nos abandonen

ni las formas de horas,

porque se está haciendo la muerte

y nuestros cuerpos se han vuelto habitaciones...

Espero que te pronuncie la primera luz anónima,

que tus ojos no se equivoquen

al doblar la esquina de una casa,

y que bajo la luna, los niños

ya no beban de piletas

porque el tiempo se despuebla.

Espero que nuestros nombres no se vuelvan estatuas

y que los abrazos no se rompan como ramas.

Que al nacer la sombra, tu rostro se repita

en el camino, como un dolor

que he perdido y que busco.





















Jean Peter Rojas (Lima, Perú, 1987)


Escultura de Auguste Rodin (The Secret ,1910)

sábado, 7 de febrero de 2009

PETIT MORT (ensayando una política del eros)

A Julio Obeso, por sus dedos musicales.
A Ana Mª Espinosa, por su olfato polícromo.

.

olvidadas albas líquidas poblaciones
donde abandonamos los cuerpos soñando
Al Berto


PETIT MORT


I

Mano tardía -se descuida sin peso de venus al hoyuelo a la axila- suscribre: la suavisima piel...
La suavisima piel invadida, inmóvil y apagada mar, desoye al vencido, hereje que se hunde en su sombrío no.

Fuera del verbo, ajeno al habla, apagándose, inútil, los ojos y el olor de ella, abismo de la flor.



II

No es morir eso que des-
membrar pudo
el cuerpo puente de su cuerpo; y
dejemos de engañar tan
sinceramente,
no es la querencia
sino lo indeseado
el fruto del vacío,
la bella traición,
el botín mohoso de treinta monedas
frías.
¿lo sabías, lo hubieras negado?



II (bis)

(paréntesis)

Un juego solitario.

No es fácil. Una y una vez otra, derrotero del esclavo, de ante-
mano expulsado de la partida.

Baba al sotano, derrota. Veneno, vaiven: vena duro callo, perdición.

Ego te sacudo. (*)


III

vacíame, vacíame hasta que no sea yo. bucéame, vuélcame. bórrame con fuego y con dientes, arrásame, haz de este orgullo mío una nada reventada de gozo, resuelto en tu magnitud desbordante.

tira, después, mi cuerpo al río. contracorriente.
para eso he cantado. por eso renunciaré al collar
del Amo. Desertaré de la Armada.



IV (sin palabras)

uno
que llega al fracaso
como
última residencia
como
apuesta inútil
uno cuya ferocidad
es un escudo
desde el que resistir
los imparables golpes
de la tiranía
en este desesperado
ya mismo
invoca
-ante el inminente abordaje
enemigo-
a la amada

y sale a cubierta, desnudo,
sin palabras.


(*) ipsación
V
Hácese la mar al borrar
una y otra vez sus orillas
Víktor Gómez
(Elogio de la noche, 2009)

miércoles, 4 de febrero de 2009

Poema de José Hierro "Renunciación"




















Lo quiso todo o nada.
Por eso dejó todo:
para tenerlo todo.

Qué sentirá. Qué cifra
ordenará su mundo,
revelará sus seres.

Qué esfinge arranca ahora
al arpa sideral
arquitecturas músicas.

Y cómo ramas, nubes
granos de sol, enjambres
de lluvia, romperán

contra su trono de oro,
salpicarán su báculo
del alba de las nadas…

José Hierro


( Perteneciente a su obra “Libro de las alucinaciones”
en ediciones CATEDRA)