viernes, 15 de abril de 2011

Alcázar de Sevilla por Nacho Iñiguez


Ahora se respira el musgo con otra fragancia de arquitectura, no menos integradora del tiempo que ahora toca vivir, un escritorio cercano, reflexivo el susurro de la cosa familiar que nos habla se acicala en el trecho de esas arcadas junto a sus pilares. Una imagen para sostener ese universo, agrupar el miedo y darle nombre, contener el alba que renace cada día en nosotros, cuando se escucha el eco en estancias de gotas casi metálicas, reverberan nuevos propósitos, son despertares o advertencia de azules paseantes.




Fotografía de Ignacio Iñiguez

y galería en enlace:





http://www.ipernity.com/doc/181782/album/228595/show


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miércoles, 13 de abril de 2011

LAS DOS CARAS DE LA FRONTERA




LAS DOS CARAS DE LA FRONTERA

Una reflexión

El ser es un ser fronterizo.
Eugenio Trías.
Sociólogo.

Los Estados tienen una característica esencial: la soberanía, esto es, la facultad de implantar y ejercer su autoridad de la manera que lo crean conveniente. Para que el ejercicio de la soberanía por parte de los Estados no perjudique a otras naciones, se crean límites definidos en porciones de tierra, agua y aire. En el punto preciso y exacto en que estos límites llegan a su fin es cuando se habla de fronteras. El espacio llamado frontera, ha sido delimitado históricamente por el hombre durante las conquistas geopolíticas a través de siglos. Área que guarda diferencias de diversas características, particularidades que separan o acercan a la humanidad, dependiendo de qué lado de la frontera se vea el horizonte. Diversas connotaciones tiene la frontera, ella nos habla según se le cuestione. Mí espacio y el espacio del otro, es esa pertenencia abstracta cuya normatividad la guardan celosamente las naciones, lugar donde aparentemente cabe el universo de todos. Las fronteras se estiran, encoge, aparecen y desaparecen son absolutamente arbitrarias y la filosofía acerca del deber ser de cada lado de ellas, es legislada, valorada y vivida cotidianamente por la sociedad que las delimita, contempla y hereda dichos conceptos a sus descendientes. La frontera también guarda como en una caja de Pandora, los parámetros con que se define el paradigma de dicho concepto. El ir y venir de la humanidad trashumante, gregaria y nómada la que recorrió la geografía de nuestro planeta, es aún hoy ese espacio y campo de batalla de infernales enfrentamientos entre seres humanos. La frontera que nos margina desde un comienzo, es la que llevamos interiormente como individuos y se manifiesta al extremo de considerar posibles enemigos a los posibles amigos, frontera que nos limita para el simple hecho de darnos la mano, así de simple y así de enormes veo sus murallas hoy tangibles en muchos territorios… Las tres condiciones para tener una nacionalidad es decir para la pertenencia a una nación como individuo, son como sabemos: Un territorio, una población y un gobierno. La única frontera que deseo derribar, es la que se crea de manera sistemática en nombre del dolor y el ultraje enarbolándose la bandera del odio recrudeciendo su rigidez y su doble moral bajo aparentes paradigmas que no funcionan en la práctica de su ejercicio, así, valores como la pertenencia, la libertad y el honor entre otros, son violentados por los mismos individuos que los ponen en práctica resguardando su frontera… y se cometen injusticias. Los problemas de frontera son múltiples, el cómo las cruzamos es uno de los puntos focales que han generando desacuerdos entre naciones, se han vuelto como la hidra de muchas cabezas. La discriminación de hombre por el hombre mismo a todos los niveles, desde las diferencias en la sociedad de raza, credo, lugar de origen o sexo llegando a la arbitrariedad de crear generaciones que ejercitan la discriminación en contra de los que viven del otro lado de la frontera a través del dominio del territorio bajo la aparente "ética política". Siniestra lucha en donde el capital invertido en armas y todo tipo de instrumentos bélicos sigue siendo un negocio muy lucrativo de la mano de la ley del más fuerte y corrupto.

Recordemos la intervención de Alemania versus el pueblo Judío o Rusia versus Polonia, hoy manifiesto desde espacios en el planeta como Israel versus Gaza, China versus El Tíbet, Estados Unidos versus México, Libia versus sus propios ciudadanos que están en desacuerdo con el gobierno... solo por mencionar algunos ejemplos. Los grandes organismos como la Organización de las Naciones Unidas y las instituciones que rigen la vida en sociedad como el estado, la familia, la religión, la educación, la economía, y el deporte, concilien la expresión de su sistema de valores para resguardar el derecho entre naciones, manifiesten su poder y colaboren conjuntamente para enfrentar a enemigos tan poderosos como el deseo por imponer "paradigmas mesiánicos" que tienen como fondo el dominio, por ejemplo, los de la riqueza de los recursos naturales de una nación. Las limitaciones entre nosotros (en cuanto al racismo) y manifiesto entre hermanos que comparten una raíz en todos los aspectos, puede combatirse con una de las armas más poderosas con que somos capaces de hacerlo; los acuerdos mínimos, es decir respetar las diferencias y particularidades de cada cual mediante el diálogo y la comunicación, detrás de cada una de las dos caras de la frontera.


Leticia Garriga. La Paz, BCS. México.

martes, 12 de abril de 2011

DIÁLOGOS



La superficie de la tierra, el mar, la atmósfera... también hacen un intento utópico de dialogar con nosotros...

¿Por qué utópico?

Porque mientras el planeta nos habla, nos grita al no oírlo... nuestras pequeñas, grandes y enormes ganas de poder, de dinero, de abundancia, de imponer nuestras creencias y no permitir las del otro, de imponer nuestros criterios, nuestra razón, nuestra opinión, nuestro punto de vista, nuestra idea de justicia a favor nuestro también... esa apremiante necesidad nuestra, hace oídos sordos a las palabras, susurros, gritos, gemidos, alaridos... hechos de agua, tierra, aire y fuego y nos introduce más aún en la batalla, en la guerra, en la falta de clemencia ni bondad por ninguna de las partes, nos mete de lleno en la boca del lobo. Esa ferocidad nuestra por poseerlo todo, por imponerlo todo, por imponernos a todos... esa ferocidad nuestra de caníbal bulímico y enganchado a la sangre y carne más jugosas... esa ferocidad de animales de caverna y coto de caza, nos emborracha de gloria ilusoria y nos impulsa con fuerza hacia la destrucción más genuina que nos retrata así; feroces, altivos, embebidos, con la barbilla bien alta mientras de las comisuras de los labios la sangre de la que nos acabamos de alimentar, gotea suavemente y convierte nuestros patéticos intentos por imitar el lenguaje, en meros gruñidos y chillidos de humanoide que no es humano. Unos imitadores de lo humano, unos imitadores de aquello que debería hacernos únicos, de aquello que debería hacernos cuidadores de todo lo que nos sostiene.

No podemos dialogar porque ni siquiera somos conscientes de que estamos monologando en una lengua inarticulada de caníbales desposeídos de la alquimia que nos haría humanos.


Pequeños Deberes- ¿Cómo sería convertir aquello que no es humano en nosotros, nuevamente en humano?


Adriana Davidova

Artículo publicado en la revista digital Divertinajes:

http://www.divertinajes.com

A.AliciaNlaRealidad@gmail.com





Dibujos-Daniel Rabal Davidov

viernes, 1 de abril de 2011

QUINUA: Poesía y Hambre

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Desarmó
La Paz
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mercados de Batallas
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niños sin quinua
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La NASA hambres cultiva
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ralos soles por ángeles
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Trazas del calígrafo zurdo
--------------- Víktor Gómez
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Quinua es un alimento básico de las comunidades andinas, altamente energético y hasta hace poco tiempo, al ser de consumo local, accesible a las poblaciones rurales. El reciente interés yanki, de La NASA y otras organizaciones, así como de países como Francia o Italia ha multiplicado su precio, haciéndolo inaccesible a los bolivianos. Consecuencia de ello es la sustitución por fideos y otros productos que no bastan para la nutrición, afectando de manera importante a los niños de la zona. La desnutrición infantil y la impotencia de los padres ante este fenómeno no deja de manifestar que las prácticas de Globoimperalismo, por más que se disfracen de mestizaje son un avasallamiento de las economías fuertes sobre las debilitadas. La Paz, es la capital de Bolivia, y juega en este texto un perverso abanico de sugerencias, al situarse paralelamente a "mercados de Batallas" cuyo nombre bélico podría inducir a pensar en varias líneas en esa Cuarta Guerra Mundial, o mejor dicho, mundializada, que ejercen hoy las multinacionales contra los pobres o empobrecidos. A su vez, tenemos que para tocar el cielo, para asumir ese progreso tan deseado por el neoliberalismo y cuyo exponente más espectacular es la carrera hacia las estrellas comenzada en la Tercera Guerra Mundial (aquella que se escondía con el eufemismo de Guerra Fría y que fue ardorosamente genocida tanto por el Gulag como por las maniobras de la CIA, El ejercito USA y otros cómplices en las interferencias y maniobras por las Américas, Oriente Medio y Africa) que lidera claramente La NASA justificamos el hambre o la miseria en zonas que expoliar por sus minerales o cultivos (pensemos en el coltán o la kasiterita de el Congo, Ruanda, etc.,) . Lo lejano e inmenso fascina y preocupa(¿?) pero no somos capaces de atender y cuidar lo cercano, de proteger del daño sistemático a los pueblos más desfavorecidos por las políticas del capitalismo tardío. No entra dentro de la lógica de mercado (eufemismo para referirnos a personas con nombre y dirección postal y de una gran entidad, que diría Brecht, que determinan cuales son sus prioridades y los medios y modos de ejecutarlas)
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Así, nos venden ralos soles por ángeles, basura por belleza, dinero por cuerpos, codeína por lucidez, apaciguamiento por paz, mangoneo por justicia.
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Víktor Gómez

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Situación de la quinua en relación con
Francia, La Nasa y el comercio internacional:
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aquí
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acá

y acullá

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